...una constante de exclusión, discriminación y olvido.
Paulina...
Eran las 17:30 del día 20 agosto 2013, el equipo de educadores de El Caracol AC, visitaba al grupo de poblaciones callejeras que habita las calles de Articulo 123 en el Centro de la ciudad capital; Paulina, mujer joven de aproximadamente 28 años, se encontraba tirada y con signos evidentes de deshidratación, sus piernas y brazos inmóviles. Sus compañeros y compañeras del grupo, dijeron que un paramédico la había visitado a las 12:00 del día, diagnosticó gripa, por lo cual les indicó que le dieran agua...no recetó medicamento alguno.
El personal de El Caracol AC, no conocía a Paulina, testimonio de sus compañeros refieren que tenía escasos diez días visitando esporádicamente al grupo, sin embargo al su llegada ya mostraba síntomas de deshidratación, dolor de cabeza, mareos, y vomito constante causado por el consumo de solventes inhalables (activo).
Las y los educadores buscaron por varios medios que Paulina tuviera atención a su salud, llamaron una ambulancia a los servicios de emergencia, sin embargo este fue negado; se solicitó apoyo al Programa de Apoyo a Situaciones Emergentes (PASE) dependiente de la Secretaria de Desarrollo Social del Gobierno de la Ciudad; enviaron una camioneta para trasladar a Paulina a la Clínica Hospitalaria en Toxicología Venustiano Carranza; a las 9:30 ingresa a la unidad, no sin antes pasar por una serie de negociaciones con las y los médicos pues la carencia de camas hacia difícil el acceso. Dadas sus condiciones de salud es canalizada esa misma noche a un hospital de primer nivel donde permanece cuatro días en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Balbuena.
Final conocido.
El día 24 de agosto Paulina Hernández Castro, muere en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Balbuena, se desconoce su historia, sus datos familiares, sus redes de amigos. Es enterrada nueve días después de su muerte.
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